Río Grande.- La semana pasada la Fundación FINNOVA celebró con éxito el Congreso Internacional “Motores del Desarrollo”, que contó con la participación de destacados expertos de Argentina, Brasil, Chile y México. El evento fue declarado de interés provincial, y convocó a más de 400 asistentes interesados en las dinámicas de las políticas de promoción económica, como la ley 19.640 de Tierra del Fuego. El encuentro fue convocado en un momento decisivo, en el que el régimen de promoción económica es fuertemente debatido.
La relevancia del evento fue reconocida ampliamente en medios nacionales, como INFOBAE, El Cronista, Ámbito Financiero e Iprofesional, que destacaron la importancia de la industria, la geopolítica y los recursos naturales de Tierra del Fuego.
En representación de la provincia, expusieron los especialistas Alberto Garófalo (en modalidad virtual), uno de los gestores del subrégimen industrial; Juan Ignacio García, economista, experto en desarrollo productivo y docente de la UNTDF; Mariel Borruto, jueza Federal de Río Grande; Juan Pablo Deluca, economista, especialista en desarrollo local y economía social; y Martín Schorr, el académico más citado en referencia al régimen de promoción industrial.
La cuestión geopolítica fue clave durante el evento. En este sentido expusieron los especialistas Leandro Ocón (en modalidad virtual), doctor en Ciencia Política y especialista en desarrollo económico; Eduardo Oviedo, investigador del CONICET y profesor de la UNR, especialista en relaciones internacionales y la política exterior de China; y Juan Rattenbach, abogado y magíster en economía aplicada, especializado en historia económica, política exterior argentina y Malvinas. Este último aportó una perspectiva histórica y estratégica del desarrollo de Tierra del Fuego y subrayó el papel de la Ley 19.640 en la consolidación de la soberanía y la recuperación de las Islas Malvinas.
Otro de los exponentes fue Christian García Castillo, especialista en regímenes tributarios especiales, quien se centró en las Zonas Económicas Especiales de Magallanes y Antártica Chilena, analizando su impacto en el desarrollo económico y la atracción de inversiones. Castillo hizo un paralelismo entre los regímenes de Chile y el de Tierra del Fuego, remarcando que la certeza jurídica es uno de los principales motores de los regímenes del país vecino.
Explicó que hay más de 5 mil regímenes de promoción en el mundo y que actualmente es una tendencia mundial el estudio para profundizar y fortalecer los mismos, en un escenario de reordenamiento del comercio internacional. Este mismo argumento fue expuesto por el mexicano Fausto Hernández Trillo, asesor del Banco Mundial y el BID, quien analizó el proceso de industrialización en México, evaluando las políticas de promoción económica y sus efectos en el desarrollo futuro del país, dejando en claro que los reordenamientos internacionales pueden ser oportunidades para fortalecer y ampliar los regímenes de producción.
Ana Vainman, Directora Ejecutiva de AFARTE, habló sobre los mitos que rodean la Ley 19.640 y desmontó creencias erróneas, como la idea de que la región solo realiza ensamblajes y el supuesto costo del régimen, al tiempo que destacó los beneficios tangibles tanto para la provincia como para el país. Su intervención reforzó la importancia de políticas fundamentadas, enfocadas en la soberanía y el desarrollo regional.
A modo de evaluación, uno de los cofundadores de FINNOVA, Ramiro Requejado, señaló por FM La Isla que “no esperábamos que el Congreso tuviera la repercusión que tuvo y nos sorprendió, por lo cual estamos muy contentos con lo que se generó. Lo que buscábamos era que se empiece a hablar en la provincia de la importancia de la ley 19.640, lo que significa el subrégimen y cómo nos afecta todo lo que está pasando. Fue un aporte de FINNOVA para contrarrestar todas las cosas que se dicen sin conocimiento”, dijo.
El Congreso llegó en un contexto en que la Cámara de Diputados aprobó un artículo dentro del paquete fiscal, el 111, que abre la posibilidad de modificar el régimen fueguino. “Seguramente hay intereses económicos, pero el problema es que se ponga la ley desde un lugar puramente de beneficio económico, porque la ley busca, a través de la economía, desarrollar y poblar Tierra del Fuego. Pero la mayor importancia está en lo geopolítico y de esto no se habla, por eso hablo de desconocimiento. Es grave lo que pasa, porque por defender una cuestión económica desde algún sector, se genera un daño geopolítico que afecta a todos los argentinos”, planteó Requejado.
“Muchas veces las discusiones se dan de manera muy superficial y no se mide el daño. Si avanza este artículo, el daño que se va a hacer no es solamente económico sino que va a estar más apuntado a lo geopolítico. Hay 50 años de promoción y, si no se cuida el asentamiento que hay de la población, a toda la gente que echó raíces y todo eso se pierde, va a volver a ser una provincia lejana, la gente se va a empezar a ir y va a cambiar la dinámica de crecimiento y desarrollo que tiene Tierra del Fuego, con todo lo que eso significa, porque es la provincia de la Antártida y de las Islas Malvinas. Esperemos que eso no pase y se pueda poner en foco lo geopolítico. Hay una gran cantidad de leyes de promoción en el mundo y estas cosas no se dicen”, observó.

Desconocimiento fueguino

Puertas adentro de la provincia, reconoció que “hay un desconocimiento de todos los fueguinos del alcance de la ley que es muy grande, porque también estamos escuchando todo el tiempo que la ley es el subrégimen que afecta a la electrónica. El fin del Congreso fue que primero aprendamos los fueguinos, porque es la herramienta más fuerte que tenemos. Los fueguinos tenemos que educarnos en este sentido y hacernos de las herramientas para transmitirlo, sobre todo en este momento que estamos viviendo”.
“Es importante visibilizar lo bueno que ha sido la ley en el desarrollo de Tierra del Fuego. Todos los meses pueden ver los monitores que se publican en FINNOVA y en las redes sociales de la fundación, porque todos los meses mostramos un monitor de datos económicos y son datos públicos. Mientras en el país se habla de un 50% de trabajo informal, en Tierra del Fuego no llega al 1%, y eso en parte es porque hay un empresariado serio y, por no tener que pagar impuestos nacionales, los impuestos locales se pagan, y eso también aporta al Tesoro y a las arcas nacionales con lo que se paga de cargas sociales. Entre otras cosas, la ley genera que no haya trabajo en negro. En el resto del país hay trabajo informal donde no se facturan los impuestos que se pagan. Esas también son cosas buenas de la ley, que hay que mostrar”, subrayó.
“Los que critican la ley han encontrado un discurso de alto impacto y en poco tiempo. Diría que ya está armado el discurso y es fácil replicarlo. Uno de los desafíos de las personas de Tierra del Fuego que tienen llegada a los medios nacionales es encontrar la forma de tener un discurso de alto impacto y poco tiempo, porque en los medios las discusiones son de muy corto tiempo. Para este Congreso se enviaron invitaciones a diputados nacionales de diferentes partidos, no sólo de Tierra del Fuego sino de otras provincias, pero no han venido, porque son espacios donde uno tiene tiempo para dar la discusión. Creo que ese es el camino desde el lugar en que estamos nosotros y vamos a seguir aportando en este sentido. Contamos en el Congreso con presencia de todos los espacios políticos, sin banderas, y es lo que buscamos desde FINNOVA. Invitamos a todos para que puedan defender la ley. Creo que todas las personas que asistieron se hicieron de las mismas herramientas que nos hicimos nosotros para explicar. La ola de comentarios negativos es muy grande y todos tenemos que aunar fuerzas para contrarrestar eso”, insistió.

Economía local

Finalmente se refirió a la economía local. “Lo más difícil de ver en la Argentina, no desde ahora sino desde hace muchos años, es el mediano y largo plazo. Desde el sector público tiene que existir responsabilidad y cuidado de los recursos. Me preocupa desde hace unos años a esta parte la inflación con la que se vive, que no existe en ningún lugar del mundo, y la gente la pasa mal con esta realidad. El impuesto inflacionario es el impuesto que más incide sobre todo en los que tienen menos recursos, porque es un impuesto directo y no distingue lugar. Es preocupante y desde mi lugar sigo trabajando para estar a flote, para seguir invirtiendo y desarrollando cosas. No me gusta quejarme porque con eso no solucionamos nada. Hay que esperar a ver qué pasa en términos macroeconómicos y microeconómicos, que es complicado porque hay gente que en esta espera lo pasa realmente muy mal. Veremos si estas medidas dan resultado para poder tener una economía estable y que se pueda pensar en el mediano y largo plazo, que desde el sector privado es muy importante para pensar en una inversión. Ese mediano y largo plazo es importante para desarrollarse, para crear nuevas fuentes de trabajo y tener una provincia más próspera”, concluyó.