Río Grande.- La ministra de Bienestar Ciudadano y Justicia, Dra. Adriana Chapperón, expuso por FM Espectáculo la compleja situación social que se percibe a través de la cartera a su cargo, a partir del aumento de la demanda de asistencia de todo tipo.
“La situación está muy compleja, sobre todo por las fuentes de trabajo que dejan de existir, tanto en el sector de la construcción como en el comercio y la industria. Todos sabemos el problema habitacional en la provincia, hay mucha gente que alquila, y esta modificación en la ley de alquileres beneficia porque hay un acuerdo entre partes, pero también habilita a poner el precio en dólares. La inflación ha bajado, pero sigue siendo muy alta mensualmente, y estos ajustes hacen que la gente no pueda hacer frente a sus compromisos. Hay mucha gente que pide ayuda para alojarse, para pagar su vivienda. Los salarios lamentablemente no han tenido la recuperación del año pasado. Veníamos sosteniendo siempre un incremento salarial que estaba acorde al aumento del costo de vida, pero estoy hoy no es posible, porque hay una disminución de ingresos a la provincia, tanto por coparticipación como por recaudación propia”, dijo.
Mencionó que la Legislatura votó hace unos días una ley que frena los embargos para acompañar esta crisis, con alcance a comerciantes y autónomos, “porque la gente no puede pagar y, si le ejecutan la deuda, es una complicación más. Ha aumentado muchísimo el requerimiento de alimentos y ahí es donde uno ve cuál es la realidad, porque cuando alguien pide alimentos es porque está en una situación crítica”, subrayó.
“Estamos tratando de hacer frente con los recursos del Estado, que son menores. Todas las organizaciones han dejado de recibir los recursos de nación para los comedores y la entrega de alimentos a muchos fueguinos que eran asistidos, y ahora todo eso recae en el Estado. Es una prioridad para el gobernador que no escatimemos en alimentos, y estamos en un fino equilibrio con las cuentas públicas”, expresó.
“En el caso de la industria, muchas veces están suspendidas las personas, no es que están sin empleo. Si la suspensión es sin salario, las ponen en una situación compleja por el tiempo que dure. La obra pública está totalmente paralizada y se suma la veda a la paralización. Esto trae una cantidad de demanda que va creciendo día a día”, manifestó.

Pasajes de regreso

Consultada acerca de la demanda de pasajes para regresar a las provincias de origen, marcó un cambio ahora, porque los que quieren volver son vecinos que hace años viven en Tierra del Fuego. “Esa es otra demanda muy importante, hay familias enteras que se han quedado sin recursos económicos y prefieren volver a su provincia, donde por lo menos tienen una red familiar de contención. Esto implica que tengamos que conseguir pasajes para toda una familia que decide volver a su provincia de origen después de haber pasado muchos años en Tierra del Fuego. Antes los pasajes eran para personas que habían llegado con alguna promesa de trabajo, y hoy estamos asistiendo a familias que hace muchos años viven en la provincia pero, a raíz de esta situación tan crítica, necesitan volver a sus lugares, donde tienen una red familiar de contención. Este también es otro gasto importante que tiene el Ministerio. En momentos críticos uno trata de ser lo más creativo posible, pero el dinero es el que hay y a veces dejamos de atender algunas situaciones que en otra oportunidad se hubiesen atendido, porque tenemos que seleccionar a las personas que están peor”, explicó.

Primera reunión con nación

Luego de varios meses de espera para los nombramientos, la Dra. Chapperón informó que este jueves tendrán la primera reunión con el funcionario encargado de bajar los programas de asistencia. “El jueves vamos a tener una comunicación por Zoom con el Secretario de Niñez, Adolescencia y Familia, que tiene la gran mayoría de los programas que recibe el Ministerio de Bienestar Social. Si bien no es una reunión presencial, esperamos contarle cuál es la situación de la provincia, que es lo que estamos requiriendo desde que iniciamos la gestión. Nosotros hemos tenido reuniones con otros ministros y cada provincia tiene sus particularidades. En nuestra provincia se ve agravada la situación en la temporada de invierno”, puntualizó.
“El fondo de comedores para Educación antes bajaba del Ministerio de Desarrollo y ahora parece que va a bajar a través del Ministerio de Educación. En principio habrían mandado a las provincias un convenio para firmar, pero no tiene monto y no sabemos si este fondo va a bajar para los comedores escolares. Creo que el gobierno nacional recién ahora empieza a tomar contacto con las provincias desde las distintas áreas y la idea es saber cómo piensan hacerle frente a esta situación que atraviesan todas las provincias. Ojalá el jueves la reunión sea productiva y se puedan establecer algunos programas. Si esto se empieza a reactivar va a haber alguna ayuda, pero todavía estamos expectantes de lo que vaya a pasar en la reunión. Los programas figuran en las páginas de nación, pero los fondos no han bajado hasta el momento”, aseveró.

Asistencia selectiva

Ante la gran cantidad de demanda, la ministra dio a conocer las pautas por las que se están rigiendo para dar asistencia a los más vulnerables. “Se está acercando todo tipo de gente a buscar ayuda, y muchos se enojan porque esa ayuda no se brinda. Lo que pasa es que el presupuesto es finito y uno intenta asistir a las familias que están en peor situación. Hay familias que hoy tienen trabajo y de todas maneras no les alcanza. Si en la familia hay dos o tres chicos, con el nivel salarial que hay hoy, no pueden hacer frente a los gastos. Ya todos hemos hecho un ajuste en los gastos, no solamente este año. Se ha agravado ahora pero no hay más ajuste para hacer”, enfatizó.
“Los trabajadores sociales hacen la evaluación y hay situaciones críticas y otras que no lo son. En el tema de alimentos hemos puesto algunos requerimientos, como que la persona no tenga trabajo y, si lo tiene, que no tenga un ingreso mayor a un sueldo y medio mínimo vital y móvil. No podemos decir que no tenga vivienda, porque agravaríamos la situación. Si la gente tiene una vivienda, no la puede vender para comer. Lo que no debe tener es más de una vivienda ni más de un automóvil, y que no cobre el Plan Alimentar, que es una ayuda que viene de nación con un monto de 78 mil pesos. El que lo recibe de la nación no lo recibe de la provincia, pero con 78 mil pesos una familia no come. Nosotros asistimos en casos de extrema vulnerabilidad y con el resto tenemos normativas que nos impiden asistir, como las personas que tienen ingresos mayores. Otro requerimiento que estamos teniendo es de materiales de construcción para mejorar la situación que tienen, también el reparto de leña, y en unos meses va a venir el refuerzo del gas. Los bonos de gas se siguen dando de la misma manera pero de todas maneras no alcanza”, lamentó.

Jóvenes en situación de calle

Como novedad en este marco de crisis, habló de la existencia de jóvenes en situación de calle, cuando lo que se veía eran personas de edad con algún problema psiquiátrico que no querían recibir ayuda. “Hoy hay gente en situación de calle y muchos son jóvenes que han venido en época de clima más benigno buscando un trabajo que no existía y hoy no pueden pagar un alquiler. Cuando se plantean estas situaciones no podemos dejar que duerman en la calle”, planteó.
“Hay personas con discapacidad que han quedado solas y con una pensión RUPE de 200 mil pesos tampoco pueden hacer frente. Hoy no tenemos posibilidad de entregar viviendas porque está totalmente parada la construcción. Se está haciendo todo lo posible en un trabajo conjunto con los distintos ministerios, para poder ir asistiendo y paliar esta situación crítica del momento”, dijo.

El costo de la salud

Otro punto crítico es la atención de salud, que es “otro problema imposible de sostener porque el aumento en los insumos de salud y en los medicamentos ha sido mayor al 300%. La semana pasada firmamos un convenio con LUCAU para poder dar asistencia financiera. Necesitamos tener cierta cantidad de turnos para nuestros adultos mayores, que son responsabilidad del Estado, no sólo los que tenemos en el Centro de Día sino todos los adultos mayores, que necesitan la asistencia de asociaciones y entidades que dan un servicio de calidad y hoy están diciendo que es imposible y que no llegan a pagar los sueldos del personal, porque todos los insumos son en dólares. Uno intenta que no se resientan esos servicios de salud que son tan esenciales y sabemos que funcionan muy bien en la provincia. Le está siendo muy costoso a nuestro Ministerio ayudar, y también es costoso para el Ministerio de Salud”, concluyó.