Río Grande.- El diputado nacional Héctor Stefani dio a conocer al programa ‘Buscando el Equilibrio’ por Radio Provincia las actividades desarrolladas en la Cámara de Diputados, particularmente vinculadas con la pesca. “Yo formo parte de la comisión de relaciones exteriores y culto y también de la comisión de pesca. Ayer se firmaron un montón de acuerdos y hay dos que vienen del Senado, que están vinculados con la pesca en las 200 millas. Algunos consideran que es pesca ilegal por fuera de las 200 millas, otros consideran que es pesca no regulada, y la ilegalidad está dada por la forma de pescar que tienen esos barcos, porque permanecen durante muchos meses. Para no llegar a puerto, reciben a un buque frigorífico que les pasa agua, combustibles y lo que necesitan para poner en caja a los productos que pescan. Esas embarcaciones tienen condiciones de vida infrahumanas y sobre eso hay un reclamo de muchos países que consideran que es ilegal. Varios países tienen estos problemas con este tipo de pesca ilegal, no deseada, y entonces los países están buscando algún tipo de acuerdo”, explicó.
“Este acuerdo es sobre subvenciones a la pesca, pasó por el Senado, que lo aprobó, y vino a la Cámara de Diputados para que lo trate la comisión de relaciones y culto, y ahora pasa a la de intereses marítimos y fluviales. Otro acuerdo está relacionado con las reglas para que los buques naveguen, y la Organización Marítima Internacional regula la seguridad de la vida humana en el mar. En esa seguridad estaban excluidos los pesqueros, porque estaba más orientada a los buques de pasajeros. Ahora incluyeron a los buques pesqueros y es importante, porque se va a poder tener un mayor control sobre los buques que están en la milla 201. El último convenio se refiere a los sistemas de balizamiento que tiene la Argentina con las boyas. Después tratamos un proyecto de mi autoría, hubo miembros de otros partidos que no lo quisieron firmar. Es un proyecto de resolución que pide acceso a la información pública sobre los muelles que están construyendo los ingleses en Malvinas, precisamente por la vinculación que eso tiene con la zona de pesca de la que estamos hablando y con las aspiraciones que tiene la Argentina con el sector antártico. Lo que expliqué en la comisión es que un pedido de informes no es para que se enoje ningún gobierno, sino que es para que los Diputados tengan la información pública de parte del Estado, no de los medios de comunicación. Existe una Secretaría de Malvinas y seguramente emitió un informe cuando se enteró de que se iba a construir un puerto en Malvinas. Lo que queremos conocer es qué se hizo desde la Cancillería y qué informe se emitió”, dijo.
“Luego hicimos una reunión de la comisión de intereses marítimos e invitamos a todas las cámaras pesqueras, los gremios estuvieron la semana pasada y tenemos una reunión prevista con el control de tráfico marítimo la semana que viene. Ayer estuvimos reunidos con una ONG ambientalista sobre la trazabilidad de la pesca y estamos trabajando bastante en estos temas”, aseguró.
Respecto de Tierra del Fuego, dijo que “la provincia tiene buques que están en la provincia y pescan con permisos nacionales. Eso se exporta desde el puerto de Ushuaia, pero la provincia tiene poca pesca porque dentro de las 12 millas podría dar permisos para pesqueros y de eso hay muy poco. No salimos de los barquitos centolleros y nunca prosperó generar otro tipo de pesca. La Argentina nunca buscó un motivo de desarrollo económico en la pesca, a diferencia de Chile, que tiene una cultura de la pesca. Esto va a llevar un tiempo y necesita de una política económica del Estado provincial. Lo mismo pasa a nivel nacional, porque tenemos una riqueza muy importante que está en vías de desarrollo. Aparentemente hay una intención de querer mejorar con respecto a la industria naval. Hay un montón de temas a desarrollar vinculados con la pesca”, manifestó.
“A nosotros nos cuesta un montón comer pescado fresco, porque no hemos desarrollado la pesca, y esa pesca dentro de las 12 millas en algún momento se va a empezar a desarrollar, porque evidentemente el recurso está. Lo que nos falta son pescadores. Además es un tema a considerar por los beneficios impositivos de la 19640. Nosotros deberíamos tener un astillero que repare los barcos, no solamente los nuestros sino todos los que andan dando vueltas por Tierra del Fuego y por la Antártida. Las posibilidades que tiene Tierra del Fuego en ese sentido son impresionantes”, subrayó.
Reforma constitucional
Por otra parte, teniendo en cuenta que en junio el gobierno provincial convocaría a elecciones de convencionales constituyentes para la reforma de la Constitución Provincial, se le pidió opinión y dijo que “estoy totalmente en contra. Hoy Tierra del Fuego tiene otros problemas más graves que reformar la Constitución, y menos cuando se piensa en la reelección del gobernador. Me he manifestado siempre en contra, pero son los ardides que usa la política moderna, para ver cómo se puede conservar el poder, sin importar para qué, porque después llegan y no hacen nada. Quieren estar siempre gobernando una provincia y no le encuentro la lógica de para qué”, cuestionó.
Para el diputado hay que definir un rumbo y entre las inversiones que debería hacer la provincia, mencionó particularmente la energía. “El interconectado eléctrico no se hizo y nadie va a ir a invertir en Tierra del Fuego si no hay energía. No se puede vivir en Ushuaia prácticamente a oscuras. Río Chico va a hacer su propia generación de energía eléctrica. Lo que está mal es endeudarse para pagar gastos corrientes, por el atraso que significa, pero no para hacer estas obras de infraestructura. En algún momento la clase dirigente deberá correr las ideologías de lado y establecer un plan estratégico para que Tierra del Fuego tenga un rumbo de políticas públicas. El puerto de Río Grande es una obra que se debería haber terminado, estamos en una isla y se necesita de puertos. Lo que le falta a Tierra del Fuego, más que reformar la Constitución para que el gobernador pueda ser reelecto, es definir hacia dónde vamos. La política es una herramienta espectacular cuando se la usa. Hay que ponerse de acuerdo en obras de infraestructura que la provincia va a necesitar. Primero hay que pensar en el turismo, que es una actividad que está consolidada en la parte sur de la isla, pero hay que conseguir que el turismo llegue a toda Tierra del Fuego. Ushuaia es el destino conocido y hay que llevar el turismo a Almanza, al camino de estancias, a la Misión Salesiana, y en algún momento los turistas deberán llegar al aeropuerto de Río Grande. El turismo va a seguir creciendo y hay que ampliar la oferta. Para desarrollar el turismo se necesitan obras de infraestructura, como caminos, ampliar una tercera mano en la ruta 3, mejorar los puertos, tener terminales de pasajeros. Si vamos a vivir de la industria, siendo productora de gas, tienen que estar las tres ciudades interconectadas con generación eléctrica, y las escuelas tienen que generar personas preparadas para la industria que se está proyectando. No es una locura que en 50 años podemos ser el Taiwán de América, es una meta. La logística antártica va a ser otra forma de desarrollo, y el gas también. La planta de licuefacción que se piensa hacer en Bahía Blanca se podría hacer en Tierra del Fuego, porque tenemos la materia prima”, concluyó.