Río Grande.- Ayer por la mañana comenzó el proceso oral y público contra Patricio Edgar Benítez de 37 años, quien está acusado del homicidio de César Osvaldo Morte, en un hecho de sangre ocurrido el 3 de agosto del año pasado.
En esa oportunidad, y de acuerdo a lo que surgió de la lectura de las declaraciones durante el proceso, Benítez tenía sospechas en relación a que su pareja, Francisca Peralta, mantenía una relación amorosa con su amigo Cesar Osvaldo Morte.
La noche anterior a darle muerte a Morte, Benítez en su domicilio de calle Sarmiento, tomó el celular de su pareja mientras ella se encontraba en el baño, revisó los mensajes de texto, donde encontró mensajes que confirmaban su sospecha, razón por la cual, en un ardid tomó el chip del celular de su pareja a la vez que la confrontó y la echó de la casa en la que además, se encontraban los dos hijos en común.
La mujer tomó sus elementos y se fue
Al día siguiente, con el chip de Carranza, Benítez, haciéndose pasar por su compañera, comenzó a llamar y enviar mensajes de texto a Morte, citándolo en la misma casa de calle Sarmiento; lugar hasta que el hombre se acercó y fue en ese momento en que fue sorprendido por Benítez, quien lo estaba esperando en la morada y sin mediar palabra alguna, le asestó una puñalada en el estómago con un cuchillo tipo tramontina.
Morte pudo irse del lugar y pedir ayuda a pocos metros del lugar, donde una persona lo auxilió y trasladó al nosocomio local, lugar en que horas más tarde falleciera.
Por su parte, Benítez, acompañado de su hijo de 11 años, se presentó en la comisaría Segunda, entregó el cuchillo con el que había atacado a su víctima y también se entregó a las autoridades policiales.
Por su parte, la Dra. Hilen Ratti Bonastre, representando a la viuda de Morte, acusó a Benítez del delito de “homicidio simple”.
En paralelo, el fiscal Jorge López Oribe hizo la acusación y encontró elementos suficientes para acusar al imputado del delito de homicidio simple agravado por alevosía”.
Acto seguido, Patricio Edgar Benítez fue convocado por el Tribunal para ampliar su declaración indagatoria, sin embargo, por recomendación de los defensores Oficiales, los Dres. Gustavo Ariznabarreta y Mariano Sardi, se negó.