Río Grande.- En las buenas épocas “la viven bien y se olvidan de la responsabilidad social empresaria” había dicho el intendente Gustavo Melella como devolución a las declaraciones del presidente de la Cámara de Comercio, quien alertó sobre una “tormenta perfecta” que se avecina mientras el estado sigue aumentando el gasto.
La profundización de la crisis económica con miles de puestos de trabajo que van a caer, su impacto en los sectores productivos, fueron parte de las declaraciones públicas de José Luis Iglesias, como representante de la asociación, pero resultaron mal recibidas por Melella.
El presidente de la entidad, consideró una “ofensa a todos los comerciantes responsables y solidarios” lo que expresó el intendente y adelantó que dejaría el cargo.
Ayer recibió el respaldo del empresario inmobiliario Diego Navarro, quien por Radio Universidad manifestó que “el análisis de José Luis fue orientado al horizonte complicado que estamos viviendo”.
Enumeró “la falta de dólares, los holdouts, la necesidad de dólares que tiene el país, la necesidad de divisas de Tierra del Fuego para producir, porque los insumos se pagan con divisas”, como los ingredientes que nos llevan a la tormenta que viene, con miles de personas sin trabajo.
“Para la primera quincena de diciembre se prevén suspensiones o vacaciones más extensas de lo habitual”, observó, por lo que apeló “a la responsabilidad y a tener la grandeza de atender el problema. Esto es un problema de todos, no es un enfrentamiento del sector público y el privado. Todos los puestos de trabajo son necesarios y todas las necesidades hay que atenderlas, en especial las que generan soluciones laborales”, dijo.
La baja de la actividad industrial ya afectó el comercio, porque presta servicios a la industria y vende los productos que consumen los empleados.
“Estamos pasando una tormenta importante y todavía no vemos con claridad el rumbo”, alertó, considerando que “el barco se va a poder encauzar cuando todos los que están arriba estén de acuerdo. No con chicanas ni viendo quién es el más pícaro se va a solucionar”, expresó.
“José Luis ha querido darle una pincelada a sus palabras al decir que estamos en una tormenta perfecta. Yo creo que estamos en una tormenta y tenemos que saber salir”, subrayó.

Oferta en pie

Por otra parte, dijo que por todo este mes sigue en pie la oferta de terrenos a menor costo y espera que el intendente lo publicite, como hizo con las tierras de la urbanizadora de María Behety.
Recordó que “el código establecía que para hacer un desarrollo de lotes había que respetar ciertas medidas, de 12 metros de frente y una cantidad mínima de superficie de 240 metros cuadrados. Tenemos desarrollos autorizados, con los servicios colocados y ya transferida la obra del gas”, afirmó, en la zona de Margen Sur.
“Cuando sale la propuesta de un sector al Municipio, el Municipio la toma, la informa a la sociedad y al listado de personas inscriptas en tierras fiscales en un gimnasio, con presencia del intendente y otros funcionarios”, señaló sobre la difusión que se le dio a la urbanizadora.
La propuesta en pie ahora se ofreció en julio también, para el evento “Río Grande se prende”. “Se ofreció a 970 pesos el metro cuadrado, porque era la semana de Río Grande y lo hicimos por todo el mes. Cuando sale esto, dijimos que por ese volumen lo podemos bajar a los 900 ó 890 pesos el metro, que es lo que dan los 160 mil pesos divididos en 180 metros cuadrados”, precisó sobre la decisión de equiparar la oferta de la urbanizadora en zona norte.
Advirtió que “hoy ya no son 160 mil pesos, porque era a julio de 2014, con el ajuste de la cámara de la construcción” y explicó que hizo su oferta por los medios porque “no me había podido comunicar con funcionarios de la Municipalidad, aunque los llamé”.
“Lo informé debidamente a la sociedad para decirle al intendente que, si querían acercar soluciones en materia de tierras, tienen una oferta al mismo valor del metro cuadrado, con la diferencia de que tenemos los servicios colocados y no tienen que esperar tres años. También les financiamos de la misma forma, con una entrega y cuotas”, apuntó.
El terreno cuesta un poco más porque “hay una diferencia en la superficie, aunque se equipare el valor del metro cuadrado. Los trámites de mensura llevan mucho tiempo, deben pasar por el estado municipal y provincial, con sus distintas direcciones. Eso puede llevar un par de años. En este momento tenemos todos los servicios hechos y el plano presentado en Catastro, ya para fraccionamiento y futura escrituración”, sostuvo, sin posibilidad de cambiar para reducir la superficie.
Estima que con un piso de 30 vecinos que quieran comprar, pueden “empezar a construir mañana”.
“Nosotros estamos haciendo un esfuerzo porque, para lograrlo, tendríamos que haber tenido una oferta en volumen. Si la Municipalidad quiere hacer la misma gestión de dar a conocer la oferta, enhorabuena, y esperamos que nos llamen”, expresó.
Destacó la trayectoria de su empresa porque “hay muchos barrios donde hemos puestos servicios, hemos planificado, hemos invertido en la ciudad. Queremos colaborar y vamos a colaborar. Hemos sacado la oferta por el mes de octubre y voy a intentar ver si se puede vender el volumen que se necesita”, concluyó.