Río Grande.- El senador Jorge Garramuño hizo futurología cercana, convencido del saldo que arrojará la reunión de convención prevista para el 22 de diciembre, y de que todo está acordado con Federico Sciurano y parte de la conducción del MPF.
Comenzó por FM Del Pueblo haciendo referencia a las últimas alusiones a su persona en los medios, particularmente las críticas de Jorge Lechman –que lo tildó de maricón- y el pedido de la kirchnerista Rosana Bertone de elevar la discusión política.
“En la recorrida que uno hace de los medios fueguinos, leí los comentarios. Son las chicanas habituales que tiene la política. Hay una cosa de la que no se vuelve, que es meterse con la familia y cuestiones íntimas de la persona. Mientras a uno le digan maricón, son las reglas de juego. Uno cuando está en la vida política tiene que saber que se van a decir muchas cosas de uno, verdades y mentiras. Y que va a haber mucho pescado podrido. Si a uno no le gusta, tiene que dedicarse a otra cosa”, manifestó.
“Por supuesto que comparto con la senadora Bertone que ojalá levantemos la puntería y empecemos a discutir las cuestiones que necesita Tierra del Fuego. Pero si bien comparto lo que dice la senadora, no nos tiene que asustar porque pasa en el país y pasa en la provincia. Ojalá maduremos y podamos discutir sobre salud, educación, desarrollo económico, y la gente vote en función de quienes le generen confianza”, deseó, insistiendo en que estos descalificativos “no son cuestiones que me sorprenden ni me preocupan”.
Igualmente reconoció que algunos “comentarios y análisis que se hacen, dan una bronca bárbara porque dicen cosas que no son reales. Uno puede salir a aclarar, pero si me molesta que hablen de mí, me tengo que dedicar a otra cosa”, reiteró.
Avizoró que vendrán “campañas sucias y volverá a aparecer lo de Wolaniuk, tratando de pegarlo con la vida de uno, y a otro le aparecerá otra cosa”, en alusión a quien fuera su mano derecha, luego condenado por recibir coimas.
Instó a “mirar con detalle la historia de cada candidato, porque hay mucho candidato inflado, y con recursos tienen fuertes apariciones mediáticas, una fuerte tarea de marketing. Pero si uno raspa y ve por abajo, es bastante vacío y no tiene contenido”, aseguró.

Convención y acuerdo

Respecto del acuerdo UCR-MPF, dijo que el miércoles por la tarde “cuando estaba en sesión, recibí un mensaje de que el día 22 se reúne la convención en Río Grande. Estimo que ahí se tratará lo que ya está decidido hace como seis meses, cuando Massa fue a Tierra del Fuego”, se adelantó.
“Ya ahí habían decidido la candidatura de Federico Sciurano gobernador, De Marco intendente de Ushuaia, Sciutto en el orden nacional, Lechman y Löffler en el orden local y ver qué otra cosa más. Hasta hay un video que vi circulando por las redes, dentro de un auto”, dijo del registro grabado de este preacuerdo.
“Ya en ese momento estaba acordado y todo lo que vino desde ese momento hasta ahora es pura cháchara. Es más, lo han demorado hasta ahora pensando en las fiestas y en irse de vacaciones, para que el impacto mediático sea lo menor posible, y que haya feria judicial por el tema de las impugnaciones”, apuntó.
Adivinando el futuro cercano, dijo que “el 22 se va a anunciar el acuerdo con el radicalismo, y que Miriam Boyadjián es candidata a vicegobernadora de Federico Sciurano. Seguramente su hermana va a ir de segunda legisladora, primero va a ir el legislador Lechman de Ushuaia. Damián De Marco, por consenso, va a ser el candidato a intendente (de Ushuaia) y tratarán de buscar un candidato de Río Grande. Me imagino que estarán tratando de tentar al actual intendente Gustavo Melella”, barajó.
Y subrayó que este acuerdo “es electoral. No hay nada de análisis serio, no se han sentado a hablar de una cuestión programática de qué hacer con la educación, con la salud. Seguramente van a anunciar que ahora se formarán mesas de trabajo para los análisis de las coincidencias: primero definimos cuáles son las candidaturas y luego qué soluciones hay que tener. Estas son las reglas de juego y nosotros haremos las impugnaciones correspondientes”, avisó.

Recurso partidario y judicial

Garramuño se mostró decidido a “defender lo que consideramos que es nuestra verdad, y que los afiliados del MPF y de la UCR decidan si están de acuerdo con esto. En caso de que los afiliados estén de acuerdo, después se harán los acuerdos correspondientes y trabajaremos todos en conjunto. Pero esto de inventar una elección interna con padrones conjuntos, libre o no tengo idea de cómo van a hacer, está totalmente fuera de lo que históricamente se da y me parece una burla. Esto encima lo plantean para cargos ejecutivos. Para cargos legislativos no, porque para concejales y legisladores son las elecciones del partido solamente”, diferenció.
“Cuando les conviene, van por el partido y cuando no, van por afuera. Lo plantean desde un número que tienen en la convención partidaria y me parece un gran error. Pero bueno, somos grandes y el tiempo dirá quién tiene razón del punto de vista político”, sostuvo.
“Haremos los descargos correspondientes en el partido y en la justicia con las impugnaciones y veremos qué se determina”, reiteró.

Interna radical por Massa

Se lo consultó sobre su visión de la fragmentación dentro del propio radicalismo, dado que hay autoridades que no comparten el apoyo a Sergio Massa. “Creo que esto demuestra el cocoliche que es –disparó sobre estos acuerdos-. Es más, a uno le genera risa las explicaciones de muchos dirigentes radicales, que dicen que Massa acompaña a Sciurano pero Sciurano no acompaña a Massa. Dicen ‘nosotros estamos con Sciurano que está con Massa, pero no estamos con Massa’. No tengo idea cómo van a hacer. Si es un acuerdo bajo lo que es el Frente Renovador, ¿cómo van a hacer para despegar la figura de uno y otro?”, se preguntó.
“Termina siendo un cocoliche y lo único que importa son las conveniencias de los dirigentes políticos. Tanto dentro del MPF como de la UCR, lo que menos interesa es el peso de la historia del partido y adónde se quiere ir. Piensan dónde va cada uno. Cada uno se ubica y se intenta una fórmula que asegure que los cuatro años que vienen tengan espacios de poder. Es lo que le pasaba al peronismo, ahora nos pasa a nosotros y le está pasando al radicalismo”, manifestó.
Y sentenció que “por dirigentes que buscan beneficios personales terminan destruyendo los partidos políticos”.

La fuerza militante

El senador prevé avanzar igual, apoyado en la fuerza de la militancia que, según dice, se opone mayoritariamente a este acuerdo encabezado por un radical. “Nosotros vamos a luchar dentro del MPF todo lo que sea factible. Ya presentamos la moción en la última reunión de convención, donde planteamos que aquellos que consideren que hay que hacer un acuerdo con el radicalismo, presenten un candidato. Si la candidata a vicegobernadora va a ser Miriam Boyadjián, que sea precandidata y explique que va a hacer un acuerdo con el radicalismo. Yo me presentaré diciendo que no estoy de acuerdo con una conducción por parte del radicalismo de este proceso, y se presentarán otros afiliados del MPF que tengan ganas de participar. Votarán los afiliados y decidirán. Si es Miriam Boyadjián, todos los afiliados del MPF habrán dado el respaldo. Lo mismo tendría que hacer el radicalismo”, consideró.
Recordó que “esto se hizo en 2007, cuando fuimos con Pablo Blanco. Tuve una interna con José Estabillo y la gané. El afiliado cuando votó sabía que se estaba hablando de un acuerdo. El radicalismo lo mismo, fue a internas Pablo Blanco con Da Fonseca. Después de que ganaron las internas en ambos partidos generamos el acuerdo. Eso es lo que quiero que se haga y es respetar lo que piensan los afiliados, y no que cinco o seis dirigentes por conveniencias personales se arroguen el título de dueños del partido. Si uno consulta con los afiliados, la gran mayoría dice que no está de acuerdo”, sostuvo Garramuño.

Sin alianza con Bertone

Se le preguntó si, en caso de perder esta partida dentro del MPF, haría una alianza con Rosana Bertone como se baraja en algunos medios. “Eso es mezclar una suma de circunstancias y me parece casi una falta de respeto”, respondió.
“Primero, tanto la senadora Bertone como en mi caso tenemos mandato hasta 2019. Todo el período del próximo gobierno de la provincia todavía vamos a seguir como senadores. ¿Cuál es la razón por la cual yo puedo acompañar a Rosana o Rosana acompañarme a mí?”, planteó.
“Independientemente del respeto personal y las coincidencias sobre lo que Tierra del Fuego necesita, ideológicamente estamos en veredas distintas y es imposible un acompañamiento de estas características. Son los pescados podridos que se tiran en política. A uno le da bronca pero se los tiene que comer”, expresó el mopofista.
Si es por comentarios, apuntó que “en 2011 me bajé de la candidatura a la gobernación porque me sacaron dos tumores del hígado y un tumor del pulmón. Y hubo gente que salió a decir que me habían pagado para que me baje. Lo leía cosido hasta los ojos, peleando por una situación de salud difícil. Dan ganas de agarrarse a trompadas, pero son las reglas de juego de la política”, se resignó.
También dejó un mensaje importante para los gestores de un acuerdo resistido: “Esta asociación que se va dando entre gente del MPF y de la UCR también empieza a generar algunos anticuerpos y canales de comunicación sobre la situación actual, la futura y las alternativas que hay. No es de sorprender que se puedan presentar nuevos frentes, si se llega a dar esto”, anticipó.

Sin candidato nacional

Finalmente se le consultó sobre sus preferencias dentro de los presidenciables y por lo pronto no tiene ninguna. Consideró “lo más inteligente” mantener distancia de esto, “salvo que uno pertenezca a un sector como el caso de Rosana Bertone, que decidirá dentro de la gente del peronismo y el FPV. El radicalismo es un caso particular porque tienen bastantes conflictos internos con UNEN. En el caso de los partidos provinciales, yo sostuve cuando se hizo el acuerdo tan rápido con Massa que no tiene sentido que hagamos un acuerdo ahora. Yo tengo buena relación con Massa, con Scioli, con Sanz de UNEN. Pero no tengo ninguno que me cautive”, concluyó.