Río Grande.- En una extensa entrevista concedida al programa radial “El correo de los sábados”, el candidato a senador y ex gobernador Jorge Colazo aseguró que el narcotráfico está “enquistado” en el poder y atribuyó en parte su destitución a las medidas que tomó para combatirlo.
Colazo comenzó refiriéndose a su actividad política, y aseguró que continuará militando “aun inhabilitado. Uno sigue haciendo política todos los días”, subrayó, destacando que esta campaña le dio la posibilidad de “volver a caminar y estar en contacto con la gente” y definiéndose “emocionado por tanto afecto y tanto cariño” que recibe.
Recordó que en octubre del ’87 empezó “a caminar en el barrio 2 de Abril, hoy cumplo 20 años”.
Sostuvo que existió una “campaña sucia de difamación totalmente armada, contra mí, mi esposa, mis hijos”, pero destacó que “por estar en esta situación ya para mí he ganado, aunque pierda el domingo, por estar nuevamente en contacto con la gente”.
Aseguró que “vienen unos años especiales para Argentina y para Tierra del Fuego” y que la crisis de hoy “es una situación de coyuntura”.
“Hay que prepararse, como se prepararon los países de la posguerra, invirtiendo en educación y cultura, en salud y en producción”, dijo, propiciando “una mesa de concertación importante para presentar todos los proyectos que tienen los candidatos para hacer un trabajo digno con la Nación y solucionar todos los problemas que tiene la provincia”.
Consultado acerca de qué se necesita para mejorar la relación con el gobierno nacional, opinó que “primero un gran diálogo. Hay que generar confianza para que el Estado nacional vuelva a confiar en Tierra del Fuego, por las cosas que pasaron. Tratar temas de Estado, no de parte de un concejal, un gobernador o un intendente solo, tiene que ser de todos”.

Universidad frustrada

En otro tramo se le consultó sobre los proyectos que varios candidatos impulsan, vinculados con la creación de una universidad pública y gratuita en Tierra del Fuego. Mencionó que en abril del 2003 presentó en el Senado de la Nación “el proyecto de ampliación de la universidad de La Matanza, La Rioja y de Tierra del Fuego. El autor fui yo porque entendíamos que hacía falta que el Estado nacional contribuyera, porque la situación de la provincia era como hoy, inestable financieramente. No se pudo sacar el proyecto porque tanto la UTN como la (Universidad de la Patagonia) San Juan Bosco habrán pensado en su momento que nosotros podíamos tocar algunos intereses; pero no era así, era garantizar la educación pública para todos y gratuita. No salió el proyecto. Algunos vivos que defendían otros intereses o no tenían hijos, no entendían cómo se partía la familia para que los chicos pudieran estudiar, si tenían plata”, apuntó, no obstante consideró que “hoy ganamos la segunda batalla, porque todos los candidatos dicen que si ganan van a presentar el proyecto. Cualquiera que gane el domingo lo va a presentar y la Nación se va a poner a trabajar para crear esta universidad que tanta falta nos hace”, confió.
Ampliando estas interferencias, dijo que “hay intereses creados en torno de la educación que no son los intereses que defiende el pueblo. Nosotros creíamos necesario, cuando trabajamos en el proyecto, tener la universidad primero para que fuera gratuita y para todos, y segundo para que no se partiera la familia, para que los padres no gastaran más plata, todo un compendio general”.
Afirmó que el proyecto ingresado al Senado “no fue avalado por estas instituciones” y que “proponía crear un Polo Universitario que contuviera a la UTN, a la San Juan Bosco, y a la Universidad Nacional de Tierra del Fuego”.
Continuó señalando que cuando llegó al gobierno se creó el polo universitario, “no como universidad porque no se podía, pero con un montón de carreras a las que podían acceder los chicos gratuitamente”.
Dijo que este proyecto “se cayó porque no pagaron los convenios” y que “esto es lo que hay que hacer ahora”, evitando dar nombres de los responsables: “No puedo decir quiénes estuvieron en contra y quiénes no, porque ya no sirve eso, queda en la conciencia de cada uno”, observó.

Soberanía en Malvinas

Respecto del avance de Gran Bretaña en la concesión de permisos de pesca en la zona de Malvinas, aclaró que está “en contra de que siempre salgamos a repudiar los actos de los ingleses, porque no hay ni hubo una política seria de relaciones internacionales. Ellos avanzan un metro y nosotros salimos con un comunicado a repudiar. Eso no sirve, necesitamos una política seria con nuestros recursos naturales que están en esta provincia grande que contiene Antártica y Malvinas. No vale decir ‘las Malvinas son y serán argentinas’, hay que trabajar para que sean nuestras”, instó.
Indicó además que este es “un acto pirata de los ingleses, que nacieron así y viven así”, pero que “es también por culpa nuestra, porque los senadores y diputados tienen que hacer una política seria para que el Presidente no salga después solo a apagar los incendios”.
Por otra parte, recordó su paso por la comisión de defensa del congreso y por la de seguridad interior, marcando como necesidad revisar el presupuesto de las Fuerzas Armadas y de Seguridad. “Es necesario que se trabaje para que impulsemos un aumento al presupuesto. Va a ayudar a un montón de cosas, porque los sueldos están muy mal”.

Fallas de gestión

Otro tema abordado con el candidato fue la situación de los excluidos y la desigual distribución de la riqueza en el país. Si bien admitió que es una realidad, Colazo recordó que hay muchos planes del gobierno que no llegan por fallas de gestión. “Si hay que hacer comedores, se harán, pero los chicos deben estar con la familia, que el papá tenga su trabajo, y que estén incluidos. Hay un montón de planes que se pueden bajar y que por falta de gestión o por pelea en algunos actores políticos no se bajan. Las cosas están, hay que gestionarlas, hay que trabajar”, remarcó, lamentando la situación en que viven muchos ciudadanos en asentamientos ilegales, tanto en Ushuaia como en Río Grande.

Un ranking preocupante

A partir de que tanto Tierra del Fuego como Santa Cruz se ubican en los primeros puestos de consumo de drogas en adolescentes, Colazo realizó algunas observaciones en las que vinculó a la política con el narcotráfico. “Hay un trabajo especial para hacer. Yo no vengo a mentir acá, no salgo mucho en las radios ni en televisión, pero los escucho a todos. Realmente algunos dan vergüenza cómo le mienten a la gente. Todas estas cosas de la droga las sabemos todos, hay que ponerse a trabajar, hay programas de Nación para bajar y empezar a construir, como un centro de adicciones porque no puede ser que los manden a Córdoba, Mendoza a los chicos”, cuestionó.
Indicó que en materia de lucha contra el narcotráfico, entre las medidas que tomó desde el gobierno se contó la reparación de las casas de admisión en Río Grande y Ushuaia. “Empezamos a armar un proyecto, se lo dimos a los arquitectos y teníamos el lugar, que era en la ciudad de Ushuaia. Hicimos convenio con el embajador de EEUU, que lo traje a Ushuaia, mandamos a un cuerpo especial de la policía a capacitarse a Israel y Miami, compramos los perros para detectar drogas; hicimos todo un cierre especial con este tema. Pero también con este tema le toqué ‘la cola’ a algunos, se metió la corporación esta que me echó por hacer estas cosas, por haber trabajado”, aseguró.
Se comprometió a seguir luchando contra esto “porque a todos nos puede pasar. Están enquistados en el poder, en todos los sectores del poder está enquistada la droga. Yo no me arrepiento porque traté de hacer, no me dejaron terminar esos sectores poderosos que no querían que siguiera en el gobierno”, reiteró.
Acerca de si esa “corporación” tuvo que ver con la división que se produjo entre el gobernador y el vice, lo descartó, señalando que Cóccaro “hacía su trabajo en la Legislatura. La corporación actuó en contra de Colazo nada más, y este señor estaba en la Legislatura. Yo estaba en la gobernación, no sé si él estaba en la Legislatura o en la corporación, eso la gente y el tiempo lo va a decir, lo que sí sé es que conmigo no estaba y nunca estuvo, hasta el último día me quisieron hacer cambiar las estrategias de gobierno, el gabinete, la renuncia y me dijeron que me iban a echar como un perro. Les dije que hagan la prueba, que me echen, sabía que me iban a echar pero no iba a escatimar el compromiso con el pueblo y no con ellos, que son diez o veinte tipos que manejan la provincia”, alertó.

El entorno equivocado

Mirando hacia atrás, y en particular hacia los seguidores que lo abandonaron, Colazo reconoció errores en la elección de su entorno. “Yo creo que hubo cinco seguidores fundamentales, impresionantes, que fueron Mateo mi nieto, Ana mi señora, María Laura, Anita Soledad y Jorgito Sebastián. Los otros fueron actores políticos, algunos más leales que otros, pero dentro del juego de la política. Dios se va a encargar de cada uno de nosotros, yo no. Para mí yo los perdoné a todos, no tengo ni rencor ni sed de venganza. En la única justicia que creo es en la justicia de Dios y él se va a encargar de todos los que me hicieron esta campaña sucia, esta difamación, estas injurias y estos malos momentos que pasamos mi familia y yo”, confió.
Anticipándose a lo que puede ocurrirle a la gobernadora electa Fabiana Ríos, señaló que “hay dos caminos en todos los gobiernos, el del bien y el del mal. Uno elige. Le va a pasar a la gobernadora electa ahora, porque no hay tres ni cuatro, hay dos caminos. Cada uno se hace responsable, yo elegí el del bien y sabía lo que me iba a pasar. Cuando uno elige, busca los colaboradores, buscamos la gente, algunos que eran del entorno. Lo que yo no supe, porque no soy adivino, es que esa persona iba a ser un chanta, un inútil o un vago, y que iba a hacer cosas en contra del pueblo. Me equivoqué no en hacerlos jurar, sino en no ver más allá, de dónde provenían, qué sector los bancaba para que ocuparan ese cargo. Me di cuenta cuando nos echaron y vi en qué sector estaban parados. Ahí me di cuenta de que dormí con el enemigo todos los días”, confesó.

De la mano justicialista

Finalmente fue consultado acerca de si volvería a hacer una alianza con el PJ. “Creo que en el justicialismo hay militantes espectaculares. Mi paso por el radicalismo fue fugaz y estoy eternamente agradecido, pero me parece que el peronismo es el partido que va a gobernar en los próximos cien años, en el país y en muchas provincias, y hay que trabajar para ir con los mejores peronistas a candidaturas de gobernación, municipales y a nivel nacional”.
“¿Se quedó con plata?”, le preguntaron en la nota: “Nunca robé ni nada por el estilo. Yo he trabajado –respondió-. A mí me investigaron todo, quince meses, no encontraron nada ni van a encontrar nada. Esto es parte de la política sucia de algunos medios, de algunos políticos y de algunos personajes de la corporación que denuncié”.